Poemas y otras fantasías.

Os invito a visitar el blog de Poemas y otras fantasías. El enlace lo tenéis más abajo. Espero que os guste.

lunes, 20 de octubre de 2008

CONFESION-JUICIO


Me eduqué mal a mi misma. No me preparé con la fuerza suficiente para afrontar la dureza de la vida. Sólo yo soy responsable de lo que me pasa. Mi cuerpo y mi alma están llenos de heridas que no han cicatrizado...Las contemplo en el espejo y pienso que no es justo que las tenga...Pero yo misma me estoy infligiendo un castigo, porque me cuesta recibir la esperanza en mi alma. He cerrado las puertas de mi casa, las de mi corazón...He cerrado las ventanas, he cerrado los ojos, he tapado mis oídos...Estoy sumida en un mundo de silencio, donde apenas hay aire...En ocasiones, la lluvia recala las paredes de mi corazón, que al sentirse húmedo se agita en un intento de secarse...No hay flores en mi jardín, tengo un invernadero a oscuras. Me he puesto una armadura que me impide el movimiento, la acción, el más mínimo sentimiento...Mis piernas están empezando a endurecerse, como un pie de cemento de un montón de columnas que no tendrán nunca tejado...Porque en mi casa no habita la luz, ni el sol, ni las estrellas...Porque en mi casa sólo vivo yo.

sábado, 4 de octubre de 2008

IG NOBEL.


¿Sonreír a la vida o que la vida nos sonría?...Sin dudarlo, escogería las dos opciones. Elegir una sola sería un desperdicio. Recuerdo que de niña me encantaba ir con un pie en la calle y otro en la acera, mientras hablaba con cualquier amiga/o camino de la escuela. Era un juego, un distraer la mente, un tontear con el equilibrio; aunque también era el ponerse en la piel de una persona coja. Caminar hacía atrás, cerrar un ojo o los dos hasta tropezar, masticar la goma de borrar (aquella que olía a nata), mezclar el chicle con pinturas de colores para cambiarle el color… Probar, el caso era probar. Ahora se prueba, aunque con diferentes sensaciones, sustancias, experiencias…
No digo que fuera más higiénico lo de antaño, ni menos peligroso en ocasiones; pero si éramos más temerosos.
En estos días, después de ver unos reportajes en la televisión sobre botellones, “afters” en los que todo el mundo se droga hasta desvanecer; me ha quedado claro que seguimos “probándonos” sin importar la edad. Nos da miedo no dar la talla en el trabajo, las juergas, la familia, la relación social, la sexual; tememos el fracaso. Lo curioso es que se da más en nuestra “avanzada” sociedad. Somos más miedosos que los habitantes de países menos desarrollados, ¿será porque tenemos más que perder? Nos cuesta hallar la paz que necesitamos. Ciertos estudios demuestran que vivimos temiendo atentados, terremotos, enfermedades, paro, etc. Nuestros políticos incrementan ese temor, por mucho que nos pese. Nos volvemos incrédulos en muchos aspectos de nuestra vida, mientras creemos con fe ciega otros. Quizá por eso recurrimos a las “pruebas”.
Curiosamente, se han entregado estos días los premios Ig Nobel. No revolucionan al mundo científico, pero nos hacen sonreír y pensar. Demostrar lo que se ha probado, desde un principio científico y divertido. Nada que dañe a la Humanidad, sólo a las mentes más serias. Veamos:
ECONOMIA: que las bailarinas de “striptease” tienen más éxito y ganan más cuando están ovulando. Lógica aplastante, y si no, pregúntenle a cualquier mujer. Sin dar más detalles.
ARQUEOLOGIA: que un armadillo puede cambiar de lugar objetos de una excavación arqueológica, dando lugar a confusión en las excavaciones. Prueben a tener un cachorro en casa que les cambie desde los calcetines hasta lo más absurdo de lugar (eso si, con la esperanza de que no te lo haya destrozado).
QUIMICA: mientras que unos demostraron la capacidad espermicida de la Coca-Cola, el equipo de Taiwán demostró lo contrario. ¡Ojo, jóvenes valencianos!...Si hacemos caso a esto, habrá que pensar en darle solución.
BIOLOGIA: que las pulgas de los perros saltan más lejos que las de los gatos. Estoy pensando en tener una de ellas como mascota. Desde luego, ocupa menos pero pica más.
FISICA: cualquier fibra, pelo o cable que sea fino tiende a enredarse irremediablemente. Que se lo digan a las mamás cada vez que hay que atar los zapatos de un crío o desenredar el pelo.
MEDICINA: Los placebos caros son más eficaces que los baratos. Y la medicina privada, la ropa cara, los coches caros, el buen cava, etc.
NUTRICION: aunque no sean frescas, si las patatas fritas crujen nos las comemos. Bueno, esto es cuestión de ruido: si cruje fijo es fresca, aunque sepa a rancia. Mi abuela ya lo decía: “se come con los ojos…y con los oídos”.
PAZ y CIENCIA COGNITIVA: por el que se otorga a las plantas el principio de dignidad; y a un hongo la capacidad de resolver un laberinto. Sé del amor de algunas personas por las plantas, ya que les hablan y les ponen música. En cuanto al hongo, genial el reconocimiento… Porque uno siempre se pregunta dónde los ha pillado, un laberinto desconocido para nosotros.
En fin, que el motivo de esta divagación era, pura y simplemente, arrancar una sonrisa; por si acaso no nos ha sonreído la vida hoy.

sábado, 2 de agosto de 2008

SOY LEYENDA...



Leyenda es una narración oral o escrita, con una mayor o menor proporción de elementos imaginativos y que generalmente quiere hacerse pasar por verdadera o fundada en la verdad, o ligada en todo caso a un elemento de la realidad.
En literatura, una leyenda es una narración ficticia, casi siempre de origen oral, que hace apelación a lo maravilloso. La leyenda se desarrolla habitualmente en un lugar y un tiempo precisos y reales, y presenta a menudo criaturas cuya existencia no ha podido ser probada. En muchas ocasiones, ni siquiera el narrador ha visto nunca a los personajes.
Así definiríamos una leyenda en el sentido más literal. Y es cierto que hay una gran proporción de imaginación, que se hace pasar 100% por verdad…Hay un lugar, un tiempo, unos personajes concretos y reales (lo dudo); apuesto más por criaturas cuya existencia no se ha probado y que nadie conoce…A veces, ni los mismos personajes se conocen. Aún así, la leyenda se va forjando, va adquiriendo cuerpo, sentido y sentimientos…A unos gusta, a otros molesta; pero ya es tarde. Todo ha empezado.
Tiene razón la literatura al decir que es una narración ficticia, que apela a lo maravilloso…Porque así es cómo se forja una leyenda, con la ilusión que da el saberse importantes si somos personajes de la misma…Pero ¿podemos creer que la leyenda llegué a ser algo real y no sólo un relato de ficción? Es difícil responder a eso…Porque las leyendas nos sitúan en un mundo que queremos sea verídico, en el que nos erigimos como protagonistas únicos, desafiando tiempo, lugares y sentimientos… Existimos mientras se forja.
Hay leyendas que dan miedo, otras risas, otras pena…Hay leyendas maravillosas que nos invitan a soñar…Pero despertar en mitad de una de ellas te descoloca, no sabes que está ocurriendo, quieres entender, quieres huir, quieres que te protejan…Estás sólo para terminarla, pero no sabes cómo…Forjar una leyenda y que perviva en el tiempo es complicado, sobre todo, porque ni siquiera has conocido nunca a los protagonistas. Tú, el narrador, eres el que crea la imagen del legendario; y puedes equivocarte… Lo más probable, es que el personaje tenga su propia vida y tú la estés deshaciendo, intentando que sea lo más próximo a tu imaginación… Te has equivocado, has roto la magia, ya no hay leyenda… El héroe ha huido, la protagonista llora en un rincón, el paraíso no existe, el tiempo se ha parado… Y con él, cualquier sentimiento… Porque ahora si estás realmente asustado.

domingo, 27 de julio de 2008

APRENDER


Ayer, mientras hacía mi reparto, me acerqué a un grupo de personas que tomaban el fresco en la calle... Una anciana me preguntó a quién buscaba, le dije el nombre y me dijo: "-Si, es aquí...pero ¿hay que firmar algo?". Le respondí que no, que simplemente le dejaba el folleto. Entonces me dijo que ella nunca firmaba nada, que si no firmaba por su madre que estaba enterrada, menos lo hacía por alguien vivo... Le dije que hacia bien, que con esa actitud se ponía en guardia en caso de alguna estafa... Fue gracioso ver como mientras ella intentaba excusarse en que no sabía leer ni escribir, las vecinas me decían que sí, que sabía... Así que entonces me dijo: "-Mira joven, lo que pasa es que no sé del todo... Mi marido, en gloria esté, me enseñó a escribir mi nombre y a leerlo antes de su muerte. Sólo lo justito para poder defenderme..." Recordándolo se le iluminaba la mirada, como agradeciendo la última voluntad de su esposo, que puso empeño en que aprendiera a firmar. Me habló de que no sabía sumar o restar en el papel, pero si en su vida cotidiana...
Creo que a veces se lleva la sabiduría dentro, yo sabiendo firmar y leer, más de una vez me han engañado... Ella, con la lección básica aprendida de su esposo, estaba satisfecha de no haber sido objeto de una cosa así jamás. Me pareció entrañable... (12-06-07)

sábado, 19 de julio de 2008

ABRÁZAME...


Para los primeros abrazos que recibí, para los primeros que dí, para los que me pidieron uno y me negué; para los que sin perdirlo me lo dieron, para los abrazos reales, para los virtuales, para los que soñe y no se hicieron realidad...Abrazos dados, perdidos, merecidos, egoistas, compasivos, generosos, tiernos, apasionados...¿Te puedo dar un abrazo?... Abrázame y bailemos...


Tienes que saber que es lo último que pido,
que estoy desesperado; según mis latidos
no me queda mucho tiempo a mi favor.
Y antes de perder de vista mi camino,
quiero mirarte un poco y soñar que el destino
es junto a ti mi amor.
Quédate un segundo aquí a hacerme compañía,
y quédate tantito mas quiero sentirte mía.
Y abrázame….. y abrázame….y abrázame… y abrázame…
Hoy me he dado cuenta que no había sentido
tanto miedo antes, que yo no decido
que Dios lo hace mejor.
Dame una razón para quedarme,
yo no quiero tu compasión quiero que estés conmigo
hasta que me haya ido.
Y abrázame…y abrázame….y abrázame….y abrázame….
Dame una razón para quedarme,
Tienes que saber que es lo último que pido
que estoy desesperado; según mis latidos
no me queda mucho tiempo a mi favor.
Y abrázame…y abrázame….y abrázame….y abrázame….




POWDER


No recuerdo las veces que he visto la película POWDER, pero siempre la termino llorando sin parar…He sentido muchas veces ese aislamiento forzado (o querido) que padece el protagonista. Cuando uno se siente diferente, por más que mires al espejo no ves lo que ven los demás.
La escena en la que él coge la mano del cazador y pone la suya en el animal herido es memorable. Es el único medio que conoce para transmitir el dolor del ciervo, la cercanía de la muerte. Nunca he podido explicar claramente que esa sensación es la que tengo con los animales. Sin saber por qué, noto si tienen hambre, sed, frío, miedo, muerte…
Este año ha sido un mal año para mis perros, han muerto unos cuantos…El dolor que me han transmitido ha sido inmenso y cruel. Su miedo, sus ganas de aferrarse a la vida y saber que el quejido último es el final.
A nadie le deseo que sienta esto que yo percibo. No sabéis lo dañada que queda el alma…Por el contrario, he tenido la suerte de poder cuidar un pajarillo caído del nido. En unas semanas ha crecido, sacado sus plumas, terminado de formar su pico…Espero en pocos días poder dejarlo en libertad. Eso me ha supuesto una satisfacción, que palia por momentos las otras pérdidas.
No puedo con el sufrimiento, me supera…Intento acumular del exterior la fuerza, la entereza, la experiencia, la sensatez necesaria para combatirlo; pero me desborda una lágrima, un lamento, un quejido, una mirada triste…En esos momentos me transformo en abrazo, en capa, en cielo protector…Lo malo es que no sé distinguir, en algunas ocasiones, si es sincera la queja; con lo que vuelvo a aislarme dentro de mi sin mirar hacia delante cuando descubro el engaño…Dejo de andar para no equivocarme…Pero también dejo de existir.

jueves, 17 de julio de 2008

El destino juega.


El destino juega cada día con nuestras vidas...Y digo juega porque cuando más hundido estás, aparece un pequeño haz de luz a lo lejos...En lo que tu consideras oscuridad. Y aunque tu corazón este roto por los acontecimientos, el destino te pone a mano algo para que reacciones y no te dejes abatir...Por un lado te embarga la alegría de futuros acontecimientos y, por otro, la tristeza de algo que ya ha pasado y se ha ido...Cuesta tanto deshacerse del pasado como de mirar al futuro con aplomo, en todo momento intentamos no perder ambas cosas...Pero hemos de dejar una en el camino, y entonces nos preguntamos ¿cuál?...Evidentemente la que ya pasó, pero eso supone renunciar para siempre a algo con lo que soñaste día a día, algo que tejiste con todo el cariño, con el amor, la paciencia, el desvelo, la risa, el llanto; pero que no se cumplió...Ahora miremos al futuro. Es un proyecto deseado, anhelado, que te dará libertad, apertura, conocimiento, seguridad, sorpresas y quién sabe si algo más...Pero le das la mano con el corazón en ella, a pedacitos, sin risa, sin cariño; confiando en que te ayude a alcanzar el olvido. Es difícil andar un camino bien acompañado...En el trayecto se pierden cosas, personas, ilusiones...Y no hay metas...Porque las metas son utopías. Y cada sueño que deseamos ver realizado es una utopía más añadir...Algunos se cumplen, y creemos que el milagro ha llegado, pero solo es un espejismo...Nada es fácil, todo son pruebas, aciertas o fallas...Pero no puedes parar de caminar, porque si lo haces habrás muerto...
Nuestra mente genera ilusión de nuevo, como rabo en las lagartijas cuando pierden la cola en un intento de supervivencia...La diferencia está en que ellas recuperan un miembro al completo, con las mismas capacidades del anterior...Nosotros, seguimos en ese camino, pero con daños en el corazón, que no siempre olvidamos; y con el miedo ante un posible nuevo fracaso. La capacidad de sentir es un privilegio nuestro, pero ¡que caro sale!

martes, 15 de julio de 2008

El Espantapájaros.


Siempre te vi mover los brazos

cuando soplaba el viento...

Haciendo extraños giros con los brazos.

De tu corazón salían pequeñas hebras de paja,

tu cabeza: una calabaza...

Tu sonrisa: una mueca de la desolación...

Observé las puestas de sol que compartimos...

Pensabas en cosas que nunca supe...

Tal vez en dioses, en libertad,

en la helada escarcha del amanecer.

Los hijos de la lluvia creciendo a tu alrededor,

viendo los días pasar.

Nadie... Tú pensabas que nadie te miraba.

Nadie... Mientras bailabas con el aire.

Creías que nadie escuchaba tu canción,

de príncipes que antes fueron sapos,

de princesas que al besarlas despertaron.

Sé que conoces cuentos de hadas y milagros,

y que esperas el tiempo de tu reencarnación...

Mientras yo... Que no soy nadie miro:

cómo giras los brazos en un extraño baile,

cómo los hijos de la lluvia crecen a tu alrededor,

cómo los días vienen y van...

Soy la flor que crece sola, en este apartado rincón,

esperando el día en que pueda unirme a tu baile,

en que escuches que yo canto tu canción,

y que nadie... Nadie... Nunca vió.

http://es.youtube.com/watch?v=cZ6_MgaUCvM

viernes, 11 de julio de 2008

SILENCIO


De cada llamada que has hecho,

de cada palabra que has dicho

... Me quedo con el silencio.

De cada sueño que has tenido,

de cada ilusión que has compartido

... Me quedo con la utopía.

De cada lágrima que has derramado,

de cada lamento que has gritado

... Me quedo con el dolor.

Porque si los sueños no se cumplen

y la ilusión se desvanece

... Yo quiero ser tu utopía.

Porque si las lágrimas siguen brotando

y los lamentos no cesan

... Yo quiero ser tu dolor.

Pero quiero cada llamada

y quiero cada palabra

... Porque amo tu silencio.

martes, 8 de julio de 2008

Actitudes


En cierta ocasión, hace muchos años, me encontraba en casa con mi madre, mi hijo pequeño y mi gata...Pasábamos la tarde tranquilamente, charlando, jugando con el crío, aprendiendo cosas...Echo de menos aquellas tardes con mi madre, fue una época maravillosa, nuestro entendimiento había llegado al punto de "madre-hija" que tanto tiempo había soñado. No peleas, no malos entendidos, ayuda mutua, comprensión...
Mi etapa de adolescente con ella fue un pequeño tormento mutuo...La educación, mi rebeldía, la forma diferente de ver la vida que teníamos nos separaba...Por otro lado, el distanciamiento con mi padre era insalvable. Crecí tan alejada de él (no físicamente), que tardé muchos años en poder comprenderle y él a mi...Sólo nos mantenía el respeto, el hecho de la paternidad, el lazo familiar, podríamos decir. Me costó mucho perdonarle su negativa a dejarme estudiar, como yo quería. Ese decir "para que lo necesitas, si luego te casaras...Lo que debes hacer es aprender a coser, cocinar y llevar tu casa". Esa era su visión de mi, como mujer...Un futuro que deber haber estudiado hoy sería distinto al que tengo...Y aunque he conseguido un cierto grado de autoestima (bajo, pero ahí está), mi meta fue siempre demostrarle que podía conseguir cosas sin su ayuda. En fin...Cosas de familia, historias que creo que todos hemos padecido.
Aquella tarde mi hijo estaba muy entretenido jugando con la gata, la hacía pelear, le tiraba papelitos para que saltara y, en un momento dado, le dio un tirón de pelo que la levanto del suelo...Obviamente la gata se defendió de aquel gesto propinándole un arañazo (leve, todo hay que decirlo), a modo de advertencia, en la cara. Abrace a mi hijo en su llanto asustado, mientras mi madre ponía el grito en el cielo por el ataque de la gata...De pronto, me dijo que "yo quería más a mis animales que a mis hijos, por permitir que la gata arañara al niño y no haber hecho nada para evitarlo"...No pude más... Y le grité que "eso no era cierto, que no volviera a decir jamás que yo era así...Que el niño tenía que aprender que a la gata no se le tiraba del pelo, y que lo que había ocurrido era una parte más del aprendizaje del niño". Ahí se zanjó todo, mi madre no volvió más a decir eso, ni a interferir en mi forma de educar a mis hijos en su relación con los animales. De hecho, los chicos son perfectamente conscientes del respeto que se les debe, y son cariñosos con ellos. Amo a mis animales, pero no por ello amo menos a mis hijos, ni a las personas de mi entorno...Es cierto que si he de posponer algo por mis bichos lo hago, pero también soy consciente de los deberes que tengo para con los demás. Un arañazo no podía ser la causa de una pelea o distanciamiento entre nosotras, ni una forma de hacer ver que mi postura como madre no era la adecuada.
No sé si mi madre entendió mi actitud, pero si sé que entiende (desde dónde esté), que no soy aquella niña que ella crió... Que la vida me ha hecho cambiar, para bien o para mal...Que puedo seguir cambiando, y que a pesar de las cosas que, en su momento, no nos dijimos...La amo y la echo de menos.

lunes, 7 de julio de 2008

Sweet Child of Mine...Dulce niña mía.

Ella tiene una sonrisa que se parece a mí,
Recordándome las memorias de la infancia,
Donde todo
Era tan fresco como el brillante cielo azul.
Ahora me parece cuando veo su rostro
Que me lleva a ese
Lugar especial.
Y si miro mucho tiempo
Probablemente me vendré abajo y lloraré

Dulce niña mía,
Dulce amor mío.

Ella tiene ojos de los cielos más azules,
Y si pensaran en la lluvia
Odiaría mirar en esos ojos
Y ver una onza de dolor.
Su pelo me recuerda
A un cálido y seguro lugar,
Donde como niño me ocultaría
Y rezaría por los truenos
Y la lluvia,
Para que pasaran por mi lado
Silenciosamente.

Dulce niña mía,
Dulce amor mío.

¿A donde vamos?
¿A donde vamos ahora?
¿A donde vamos?
Dulce niña mía.


Así dice la letra de la canción que escogí para el blog...Siempre he sentido debilidad por ella. Me ánima, me llena, me hace bailar...No sé si me trae recuerdos de la niñez, ni siquiera si me siento identificada con la letra...Pero es de las pocas cosas que, en los malos momentos, me levanta de la silla.

http://www.youtube.com/watch?v=P-AYAv0IoWI

domingo, 6 de julio de 2008

MIRADAS


Me he perdido en tus ojos, buscando lo que tu buscas...He intentado encontrar algo que te hiciera sonreír, pero ¿qué?...Quise taparte con mis brazos y acercarte a mi cuerpo, porque me dio la impresión de que sentías frío. Busqué una mueca en mi cara que te sacara una sonrisa...Pero seguías perdido. Viendo tu desnudez, quise adivinar qué era lo que más necesitabas...Por un momento quise ser madre, para confortarte...Ser pecho para alimentarte y fuego para darte calor...Lo único que sé es que quiero impedir que esa lágrima que intenta asomar no fluya, porque entonces me desarmas y no sé por donde continuar...Quiero encontrar, quiero encontrarte, para poder hacerte reír y abrazarnos en esa cercanía...Quiero que dejes de perderte, que me busques con los ojos y me digas: "Hola...¿quieres jugar?".
Porque si me sigues mirando así voy a terminar amándote...

sábado, 5 de julio de 2008

AGUA, TIERRA Y FUEGO


Quisiera sentir que tanta separación de ti no es mi agonía.
Pensar que la lluvia arrastra consigo los males y envidias…
¡Acechando está el mar para tragarlas vivas!
La soledad no rompe el silencio que una música produce,
pero si el recuerdo que me acoge en manto suave…
¡La brisa me besa al pasar y roba mis lágrimas!
Los pensamientos que sin sentido llenan mi frente,
vacías palabras forman en mis labios que besan muerte…
¡La tierra está esperando tu cuerpo blanco y frágil!
Me queman las entrañas si me besas…Y, en el abrazo,
nuestros cuerpos se juntan, nadie los detiene.
¡El fuego prende en ti y en mí!, ¡Me quema!, ¡Ardo!
Tus ojos se cierran en gemido de angustia que no grita.
Tus labios sonríen con la amargura de la flor que muere…
¡El esclavo maldice tu poderío y orgullo crueles!
A veces es mejor dejar volar la pluma y el pensamiento,
que llorar en un abrazo, en una muerte, en el viento…
¡El mundo es un vacío que te ahoga en silencio!
Quisiera que el mar me tragase viva, cual naufragio…
Quisiera que la brisa me besara constantemente y mis gemidos
los lleve dónde el fuego y la tierra, los abrasen y entierren.

lunes, 30 de junio de 2008

DESPERTAR



Y me acerco como cada mañana,
Con las flores en la mano,
Todavía oliendo a tostada y a café…
Las campanas repicando a maitines para ti.
Te imagino en la cama, acostado,
Con los ojos entornados, retozando;
Esperándome en silencio…
Y sientes cómo me acerco
Y recompongo el sepulcro,
Arropándote, mimándote;
Como si estuvieras a mi lado…otra vez.
Y a tus pies pongo las flores,
Rosas blancas, rosas rojas…
Pienso que me estás mirando,
Me sonríes, te sonrío…
Y una lágrima resbala por mi piel.



http://www.youtube.com/watch?v=-wbR4khDqXA

domingo, 29 de junio de 2008

Y tú...¿cómo te llamas?


Atrás dejábamos la casa forestal en la que habíamos vivido los últimos años, para mí los primeros. El camión iba cargado de muebles, sacos con ropa, cesta de comida, y en sillas, en lo posible sujetas a alguna parte, íbamos sentados. Mi padre iba delante con el conductor, mi madre asomada a la parte de atrás (pobrecita...toda su vida se mareó), uno de mis hermanos iba tumbado en mesa del comedor, y el resto junto con mi abuela sentados en las sillas. Habíamos iniciado un viaje a un nuevo destino...Era el primero para mí, aunque alguno de mis hermanos ya había hecho esto en tres ocasiones más. En algún momento tuve esa sensación de mareo y casi vomité...Mi madre me puso a su lado, pero la visión de la carretera alejándose era vertiginosa, así que opté por volver a sentarme junto a mi abuela. Mi abuelo era sordo, permanecía callado en un rincón de la parte trasera de aquel camión...Nunca fue de muchas palabras, su sordera le alejaba del mundanal ruido (nunca mejor dicho). Cuando llegamos al puerto, el mareo se hizo casi general... Mejor ahorro los detalles.
De pronto, mi padre gritó desde la cabina: "¡Ya estamos llegando...!" Rápidamente nos asomamos todos a la trasera del camión y empezamos a ver una larga recta, llena de enormes árboles a los lados (años después los talarían todos)...La recta del Río, según supe después. Estábamos llegando al pueblo, a nuestro destino, al lugar del que no he vuelto a salir...
Tras subir una empinada cuesta, llegamos a una calle no muy estrecha, llena de casas altas y blancas...Era la calle Santo Tomás...Allí íbamos a vivir, en el número 28. Mientras descargaban el camión, mi madre, en vista de mi palidez, dijo que me quedara sentada en la acera; y así lo hice...Al momento, un grupo de niños se acercó a ver que ocurría. Hablaban cuchicheando entre ellos, hasta que una de las niñas se acercó y me dijo: "¿Cómo te llamas?"..."María", respondí. Y volvió a insistir: "Pero... ¿María qué?"; contesté que sólo María...Entonces ellos, mirándome como a un bicho raro me increparon: "Pues vaya nombre más feo!..." Para, a continuación, alejarse jugando con la pelota y riendo a carcajadas.
Días después pude saber que en el pueblo, casi todas las niñas se llamaban María y algo más. Pasé años pensando que por qué no me habían puesto Mª Teresa, Mª Isabel, Mª Amparo...
Con el tiempo aprendí que llamarse María era genial...Que apenas habían nombres cómo el mío...Nadie me confundía...Era yo. Al cabo de los años, hubo un "boom" de Marías en el pueblo. Ahora hay tantas, que cuando alguien grita en la calle mi nombre, nos volvemos más de una...

miércoles, 25 de junio de 2008

Si me besas...


Si me besas, la lluvia parará...
Parará la lluvia de palabras que salen de mi boca
y que tu lees cada día...
Parará la lluvia de versos que te envío...
Parará el caminar de mis deseos...
Parará la música que te dedico...
Parará, también, mi anhelo por ti...
Porque si me besas me habré detenido...
Habré parado para besarte, para escucharte...
Dejaré de andar, de cantarte al oído, de desearte...
Si me besas, la lluvia de mis ojos parará.

viernes, 20 de junio de 2008

¿Qué vendes?


Tenía una pequeña tienda de barrio, mi negocio era vender música, alquilar videos, y las consabidas chuches para los niños. Mi clientela era fija y variada, hasta que apareció él...Entro tímidamente, apoyado en su bastón, se descubrió la cabeza y dijo: -“Buenas tardes”.
Le conteste igualmente y sin esperar mucho me preguntó: -“¿Venden ustedes capazos para recoger la oliva?”. A lo que conteste con una sonrisa que no… El señor se quedó mirando todo con ojos curiosos, como de niño...Y acercándose a mí me dijo en voz bajita: -“Esto que hay aquí es todo para "vicio", ¿verdad?”… Seguí sonriéndole y le dije que más o menos así era... Volviendo a mirarlo todo de nuevo, se despidió, se colocó de nuevo su boina y se fue.
Y así cada vez que se acordaba de que mi tienda existía. Unas veces pedía bombillas, otras tijeras de podar, azadas... Para luego, y después de mirar todo atentamente, volver a hacer aquella primera pregunta. Opté por darle un puñado de caramelos cada vez que venía, a fin de que no se fuera sin nada. A eso se unió la charla amena que me ofrecía con sus visitas. En una ocasión me dio una pequeña cantidad de pesetas para compensar mi amabilidad, puesto que decía que siempre se iba de allí sin comprar nada y habiendo molestado... Un día entró una mujer diciendo que era hija de mi cliente especial, le pregunté si le había pasado algo y me respondió que no, pero que dejara de darle caramelos a su padre. Entendí su enfado, pero me dolió que pensara que había dañado su salud de alguna manera. Ya no le volví a ver más... Al poco tiempo, me enteré de había fallecido.
Creo que siempre le vi como el niño curioso que llevaba dentro, y que en su interior, a pesar de la edad y la falta de memoria, todavía tenía despierto a ese chaval que siempre imagine que hubiera sido de joven... Y que despertó en él, el día que se atrevió a entrar en mi tienda."

miércoles, 18 de junio de 2008

La niña azul.



Hubo un tiempo en que yo era una niña azul…Me encontraba en un limbo de bosque verde, con una amplia casa y una numerosa familia. Yo era la niña azul que llegó la última, cuando no la esperaban, pero que le dio una gran alegría a mi madre…
La niña azul tenía un parque privado lleno de pinos y aromas naturales, un enorme cielo azul que la protegía y una vida por delante para seguir siendo azul. Ella nació dos veces: la primera en el alumbramiento, la segunda porque su padre le salvó la vida…Sus gritos se oyeron con el terror que eriza la piel al instante y aquel hombre, justo de zalamería, corrió sin mirar hacia atrás; buscando con los ojos del miedo a la niña. La encontró cosida a mordiscos y picotazos por aquel panal de avispas, que sin dejar de agredir a todo el que se acercaba, seguían ensañándose con la pequeña. Él se llevo una buena parte del ataque, pero la niña apenas podía seguir llorando. De forma instintiva la llevo al lodazal de aquel par de cerdos que tenían para la matanza (buena reserva de comida en los días fríos de invierno), y allí la untó y untó hasta embadurnarla de aquel orín apestoso y mezclado con la tierra. Dios sabe cómo, pero aquello me salvó la vida; a pesar de que sigo siendo alérgica a esa picadura.
Y seguí siendo azul, de un azul alegre e intenso, entre salvaje y plácido, rodeada del cariño que me daban y, a veces, robaba con mi llanto infantil. Mis amigos: los animales; mis juguetes: la piñas del “sequero”; mis fantasías: el cielo azul y todo lo que cruzaba por él.
En apenas unos años, la vida me obligó a hacer cosas de adultos, a pensar en adulto, a sentir en adulto…La vida, mi madre y sus cólicos, el fatal destino…Le dije: “Niña, espérame que hago unas cosas y vuelvo a jugar”… Pero ya no hubo vuelta atrás, ella se quedó esperando en alguna parte de mi mente, aguardando paciente el regreso de su amiga. En ocasiones, asoma su cabecita y pregunta si voy a tardar mucho…Y llora con una tenue pataleta…
A la hora de la puesta del sol, subo a la terraza y, allí, nos encontramos por unos instantes. Nos damos la mano, miramos al cielo, adivinamos la forma de las nubes, contamos los aviones que pasan, echamos migas de pan a los pájaros y reímos sin saber el por qué. Dormimos en la misma cama. Ella, se acurruca y reza en voz bajita; yo, la abrazo y le digo que todavía sigo siendo azul como ella; aunque de un azul diferente, con menos brillo, con menos inocencia, con alguna tristeza de más…Pero con la misma ternura que ella nunca perdió.

domingo, 15 de junio de 2008

Quédate...


¡Ojala que llenaras mi alma de olvido,
y de tu boca dijeras que no te vayas mi vida!
Entonces me quedaría...
¡Ojala que en tus auroras y en tu pecho reposando,
mientras la Luna nos mira, tú sonrías como yo!
Entonces me quedaría...
¡Ojala viviera en tus sueños, pero no escondida,
sino bailando con besos en tu boca y tus mejillas!
Entonces me quedaría...
¡Ojala que me llevaras al jardín de tu poesía,
pero no solo un instante para sentir que soy tuya!
Entonces me quedaría...
Tal vez para siempre...

El Cajón...


Me alegra que revolvieras en ese cajón abierto,
y que encontraras el lazo, y la rosa que cortaste;
y el cordón rojo que me quitaste para tener algo mío...
Claro que me dejaste tus caricias, aún las siento en mi piel...
Y si guardaste ese beso, tal vez, en silencio, te lo reclame;
para quedarme algo tuyo, aparte de ese "te quiero"...
Porque en mis cajones guardo: el amor que yo sentía,
las caricias que me diste y con las que mi cuerpo tembló...
Así que dame ese beso y dime ese "te quiero"...
Puedes seguir con tu vida, arreglando tus cajones...
Yo seguiré con la mía, añorando dos corazones...

Azul desteñido


Rodeados de azul, rodeados de mañanas,
Dos voces azules, dos gotas de rocío
Que caen en tu rostro y en el mío...
Ojos de azul imaginado,
Miradas a la espera de los besos,
De tu boca, de mi boca, tan ansiados...

Amanece y la neblina se disipa...
Deshacemos los abrazos de la noche,
Abrimos la ventana al nuevo día,
Elevando el azul al alto Cielo...
Repletos de caricias que pensamos,
Desnudos sin azul, frente a frente...

María 06/05/08